por CSM » Lun Nov 09, 2009 0:24 am
Hola a todos!!!
Bueno, muchos de vosotros me conoceis en persona, voy a todas las quedadas nacionales y me lo paso muy bien con todos, no suelo escribir mucho en el foro, pero si leer, todos los días.
Os quería contar a todos lo que me está pasando y es que aunque soy bastante optimista y casi siempre de buen humor a veces te viene bien un empujoncito.
Como desde hace aproximadamente un 6 semanas, he notado que veo bastante mal con el ojo derecho, al principio pensé que debía visitar a mi óptico, pero según pasaban los días notaba que perdía vista, no agudeza, si no que poco a poco me quedaba ciego, mal asunto.
Después de visitar a tres oftalmólogos distintos (dos de ellos de urgencias), todos me dijeron que de los ojos no era, que se veían perfectamente y salvo mis lesiones en la retina, y cicatrices de laser, no tenía nada especial, me mandaron al neurólogo.
Esto ha sido en octubre, mediado, y la cita era para finales de febrero, pero yo no dejo de perder vista!
El colmo fue cuando hace tres o cuatro días rocé de lleno el paragolpes del C4 contra la pared del garaje, no podía calcular las distancias ni las profundidades y eso fue la gota que colmó el vaso.
Este sábado decidí ir a urgencias, con el convencimiento de no salir de allí hasta que me diesen una solución, y así lo hice.
Me vio un neurólogo con gran parecido a Eugenio, pero con bastante menos gracia (para los más jóvenes del foro, Eugenio fue un gran humorista catalán)
El tipo no dejaba de afirmar que no veía la causa por la que yo acudía a urgencias, que el no veía ninguna patología que indicara que tenía que estar allí, y que tenía que visitar a mi médico de familia y pedirle cita (cita que yo ya tenía para 5 meses más tarde).
Ya me calenté y le dije que de aquí yo no me marchaba hasta que alguien me dijese por que me estaba quedando ciego de un ojo, y que no me importaba hablar con quién fuese!
El se quitó de en medio, viendo el panorama y le colgó el marrón al jefe de urgencias, el cual al saber los síntomas, no lo dudó ni un momento y me metió en un box, y a partir de ese momento empezó la fiesta.
Introducción de vía en la muñeca izquierda, sacar sangre para analizar y directo al sótano para un T.A.C. cerebral.
Empezamos con el primero y no se cuanto tiempo pasé en la mesa del T.A.C., pero al rato sale una enfermera de la cabina y me dice: alguna vez te han hecho un contraste? es que no lo acaban de ver claro y me dieron los papeles para firmar dando mi consentimiento y pasamos al segundo T.A.C.
Acabado me suben de nuevo a urgencias, y a los 15 minutos sube el jefe de urgencias y me dice, "Carlos, en el T.A.C. hemos visto algo, en concreto un tumor, necesitamos estudiarlo más, aunque parece benigno, no te lo puedo asegurar"
Me creía solidificar como una piedra a medida que sus palabras entraban por mis oídos, la palabra benigno, me dio un poco de aire, el suficiente como para bromear, "bueno, entonces me como el turrón", a lo que él contestó con muy buen sentido del humor, "si hombre como no te vas a comer el turrón", aquello me tranquilizó un poco, pero mientras se alejaba por el pasillo con el neurólogo, le escuché decir... "espero".
Fue, como si me hubiese subido a una nube y pareciese que todo eso le pasaba a otra persona... no era capaz de asimilarlo, pero no puede ser, sólo tengo 38 años... soy demasiado joven para...
Traté de calmarme y tomar las de nuevo las riendas de la situación, me subieron a la planta de oftalmología, yo caminaba como al que su novia de toda la vida, a la cual adora, le acaba de decir que ya no le quiere y que se va con su mejor amigo.
Pasé otras tantas horas haciendo pruebas con el oftalmólogo, aquel joven me transmitia seguridad, de mi edad aproximadamente, seguro de sus actos y con cierta ternura, consiguió que me tranquilizase de nuevo, pero la palabras "tumor", "radioterapia". "operación" sonaban dentro de mi cabeza como un indeseable eco.
Y aquí estoy, después de un montón de radiografías, electrocardiogramas, análisis y medicamentos, ingresado en la 5 planta del Clínico, esperando una larga semana, llena de pruebas y con un resultado final por decidir.
Espero no aburriros con mi historia, pero ahora necesito toda la ayuda que pueda recoger.
Gracias.