¿Qué ocurre si metemos en una coctelera las mejores cualidades deportivas de las marcas Audi y Lamborghini junto a la experiencia de la firma preparadora MTM? El objetivo de esta combinación es la creación de un vehículo superdeportivo que finalmente ha visto la luz con la denominación de Gumpert Apollo.
El nombre de la marca Gumpert viene del apellido de su fundador y director general, Roland Gumpert, quien ha fraguado la práctica totalidad de su trayectoria laboral en Audi. Este ambicioso empresario ha unido sus fuerzas con Roland Mayer, máximo responsable de la empresa preparadora MTM (Motoren Tecknik Mayer) para crear el espectacular Apollo.
Una impresionante carrocería con multitud de enormes entradas de aire, un alerón trasero de tamaño desproporcionado, sistema de apertura de puertas en forma de alas de gaviota y un peso total de 1.200 kg (fruto del empleo en su construcción de aluminio y fibra de carbono) son su carta de presentación. Pero hay más, mucho más.
El corazón que impulsa a esta nueva bestia indómita es un motor biturbo 4.2 de ocho cilindros en V, el mismo básicamente que incorporaba la anterior generación del Audi RS6 (el modelo actual monta un motor V10 biturbo de origen Lamborghini y 580 CV). En el caso del Gumpert Apollo, su propulsor es capaz de entregar 636 CV a 6.500 rpm y un par motor de 850 Nm (86,7 mkg). Según cifras facilitadas por Gumpert, su joyita puede alcanzar los 360 km/h de velocidad máxima, acelera de 0 a 100 km/h en 3 segundos y el 0 a 200 km/h en 8,9 segundos. Este motor se acopla a un cambio secuencial de seis velocidades.
Que se vayan preparando los Koenigsegg, Pagani Zonda, Bugatti Veyron y el modelo español GTA porque les ha salido un rival de altura.
Por cierto, si estás interesado en él y cuentas con una economía que te permite darte un caprichazo en tiempos de crisis, el precio con que el se comercializará el Gumpert Apollo en enero de 2009 es de 301.600 euros sin incluir impuestos.
