Por lo visto les llamó la atención mis matrículas acrílicas, decían: "¿qué les ha echado para brillar tanto?"
Les expliqué lo que eran, les enseñé la factura y otra hoja donde indican que son legales. Se sorprendieron pero les pareció bien.
Después cotillearon sobre el cableado y las piezas de mi c4rro desmontadas, la situación comenzó a relajarse. Estuvieron cerca de media hora preguntando sobre la alarma porque les encantaron los mandos a distancia, preguntas sobre la tapicería de polipiel de Gomezpla, mis llantas OZ y cómo no: "¿qué tal son los C4?".
Lo cierto es que estuvieron muy preguntones, pero eran cuestiones por curiosidad más que otra cosa, incluso querían saber lo que costó mi C4 Exclusive "antiguo".
Pero la pregunta que más gracia me hizo fue una que me hicieron a mí directamente cuando vieron mi c4rro medio desmontado por Gomezpla: "¿te fías de él?". 
Me tuve que contener...
Pira, en cuanto a las matrículas acrílicas: prueba superada con nota.
